domingo, 16 de septiembre de 2007

Oktoberfest


El día 22 de septiembre, el alcalde de Munich abrirá el Primer barril y gritará aquello de “O'zapft is!” (¡Abierto está!). De esta forma dará comienzo la Oktoberfest

¿Por qué se llama Oktoberfest y comienza en septiembre?

La fiesta de la cerveza de Munich tiene su origen en las celebraciones de la boda entre el futuro rey de Baviera Ludwig y la princesa Theresa de Sajonia en 1810. El primer domingo de Octubre de ese año terminaron las celebraciones de la boda para los habitantes de Munich. Debido al éxito de la fiesta, los habitantes de la ciudad empezaron a celebrar todos los años una fiesta similar y para calcular la fecha en la que debe empezar cada año, se cuentan dos semanas antes desde el primer domingo de Octubre .

La fiesta se celebra en Theresienwiese, un descampado de unas 46 hectáreas, situado a un 1 kilómetro de la estación central. Para llegar es bien fácil, seguir a cientos de personas vestidos de bavareses.
Del 22 de septiembre al 7 de octubre, por el recinto de la Oktoberfest, pasarán 6 millones de personas de todas las partes del mundo. Seis millones de personas que consumirán cinco millones de jarras de litro de cerveza - cuyo coste es de 7 €-, más de medio millón de pollos asados, 200.000 salchichas de cerdo, quince toneladas de pescado...



En Theresienwiese se encuentran 14 Bierzelte, unas tiendas de cerveza enormes con unos 100.000 asientos entre todas. Uno se sienta en bancos de madera para consumir la cerveza, porque es imprescindible estar sentado para poder pedir la cerveza. En caso de que no tuvieras sitio, como fue mi caso durante los primeros momentos en la Oktoberfest, le tienes que pedir a alguien que te deje un poco de banco para poder sentarte en él, por lo menos, durante unos segundos, y de esta forma ya puedes pedir, aunque después te levantes inmediatamente.

Es recomendable ir un día por la semana, porque durante el fin de semana está masificado, y para poder econtrar una mesa es necesario ir a primera hora de la mañana. Para que podáis encontrar alojamiento a un precio razonable, es necesario hacer la reserva del albergue
con una año de antelación, -o si somos pocos, y Sebastian nos deja- siempre nos quedará su casa.
Si te encuentras mal, no hay problema, los alemanes lo tienen todo pensado, vas al "vomitorio" y como nuevo. Fijaros como tiene esas barras para las manos.
Sebastian, Tanti Auguri.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Está bien el invento ese de vomitadero. Había que conseguir uno y llevarlo para el bajo